Ciclo de seis conferencias pronunciadas en Viena, del 9 al 14 de abril de 1914.
Título original: Inneres Wesen des Menschen und Leben zwischen Tod und neuer Geburt.
Volumen de la Obra Completa : GA 153.
Traducción: Miguel López-Manresa
También publicado en España por Editorial Pau de Damasc, Barcelona, con el título: “Las vivencias del alma entre la muerte y la nueva encarnación”
Contenido:
I.- Las cuatro esferas internas de la vida anímica humana: percibir, pensar, sentir y querer. Las experiencias espirituales provocadas por su fortalecimiento fuera del cuerpo.
II.- La salida del cuerpo por el fortalecimiento del poder recordativo. Vivencia de lo puramente temporal antes de la encarnación. Religiosidad, tentación, educación en la corriente temporal prenatal.
III.- Formación de fantasmas en las percepciones sensoriales. Las imágenes-sombra del pensar; el tesoro de la memoria. Lo no nacido en el sentimiento y en la voluntad. Percepción viva y visión interior en la época precristiana. La acción del Cristo.
IV.- La diferencia entre la vivencia en el mundo espiritual y en el plano físico. La transformación de la sabiduría en fuerzas de vida. La fuerza creadora de la voluntad afectiva. Cómo las cosas nos hacen preguntas. Preparación en la tierra para el impulso de la vida en lo espiritual.
V.- Procesos que tienen lugar entre la muerte y la medianoche cósmica. La mirada imaginativa sobre las envolturas abandonadas. Despliegue de la consciencia en el mundo espiritual: desprendimiento de las fuerzas anímicas ligadas a la tierra, recordar, sentir y querer, luz anímica creadora. Sociabilidad y soledad en lo espiritual. La medianoche cósmica. El volverse a adueñar de uno mismo en la existencia cósmica.
VI.- La vivencia del alma a partir de la medianoche cósmica: la acción supratemporal del pasado como mundo espiritual exterior. Transformación en facultades de los acontecimientos y actos del pasado. Puntos de vista en la formación de un arquetipo etérico-espiritual para la siguiente vida terrestre. La plétora de fuerzas espirituales por la acción del impulso de Cristo.